Ori and the Blind Forest

Ori and the Blind Forest (Moon Studios, 2015) podría ser descrito en 3 palabras: rápido, sencillo y divertido. Es un videojuego de plataformas de scroll lateral, en el cual encarnamos al pequeño Ori, un ser de luz que salta más que un Magikarp en tierra firme.

La historia comienza cuando una hoja del Gran Árbol Espírito se desprende de él a causa de una gran tormenta, esta hoja resulta ser un pequeño ser de luz, Ori, el cual es encontrado y criado por Naru, un ser del bosque de Nibel. El Gran Árbol usará la luz para llamar de vuelta a Ori, pero Kuro, una malvada lechuza, destruirá el poder del árbol, provocando que la luz del bosque comience a apagarse. Esto hace que el bosque vaya muriendo lentamente, y no solo las plantas, también los seres, como Naru, y, por último, Ori. El Gran Árbol Espírito usará su último aliento para salvar la vida de Ori y aquí, comenzará su aventura.

Como podemos observar el comienzo de la trama es simple y funcional. Explicada mediante el gameplay y alguna cinemática, sin ningún tipo de conversación, solo la voz del Gran Árbol Espíritu, el cual actúa como narrador. Es una historia sentimental, que nos llega a la patata de manera exponencial, y cada uno de los personajes que vamos observando, aunque simples, aportan su granito de arena para construir una narrativa muy tierna. Con cada paso que damos, se siente como el bosque necesita nuestra ayuda, sentimos la necesidad de apresurarnos a salvar Nibel, pero en contra posición, es fácil perderse y explorar por su gran mapa, es increíble como el juego me absorbió, y mientras escribo esto, me están entrando unas ganas lucas de hacer mi segunda run.

En su periplo, Ori estará acompañado de Sein, un espíritu que nos ayudará a vencer a los enemigos mediante descargas de luz que nosotros controlaremos. Las habilidades de Ori and The Blind Forest se basan en la subida de nivel, donde tendremos 3 ramas que podremos ir subiendo mediante la ganancia de experiencia, pero algunas habilidades las desbloquearemos con el desarrollo de la historia. Ori es muy satisfactorio de jugar, sus movimientos son rápidos y agiles, cuando le coges el tranquillo puedes moverte por todo el mapa con una sencillez increíble. La palabra que mejor se le ajusta a su jugabilidad es satisfactorio. Al ser un juego cortito, no quiero hablar mucho de la historia, pero el mapa está diseñado a la perfección, no solo genera rejugabilidad, si no que incita a conseguir todos los coleccionables, los cuales aportaran salud y poder a Ori.

La banda sonora de Ori and the Blind Forest de Gareth Coker (Behind the music), es una de esas bandas sonoras que después de jugar te sigue resonando en la cabeza hasta la eternidad. Si posees la suficiente destreza como para no morir, la música se adaptará al juego de manera excepcional. Tenemos temas relajados como Naru, Embracingthe Light (feat Rachel Mellis) el cual podemos escuchar al inicio de la historia, y el cual me parece de los mejores, también me gustaría recalcar Restoring the Light, Facingthe Dark o FleeingKuro Dos temas que encarnan perfectamente la tensión de algunos momentos del juego, pero sin duda me quedo con el tema final,  Light of Nibel (featAeralie Brighton) La cual no deja de ser una versión de Restoring the Light, Facing the Dark, pero, es una traducción musical de lo que es Ori and the Blind Forest.

En resumen, Ori es un gran juego para los amantes de los plataformas, asique si tenéis un poquito de tiempo, darle una oportunidad, a ver si os entusiasma tanto como a mí. ¡Nos vemos en Nibel!

Quería deciros que estoy empezando la época que todo estudiante ama: entrega de trabajos, Exámenes y demás, por lo que hasta mediados de junio no subiré muchos post. También os recuerdo que podéis seguir el blog en el menú lateral para enteraros de cuando suba un nuevo post, ¡Gracias por leerme!